Alejandro Sawa. Mala Estrella (II)
Querido Darío: Vengo a verle después de haber estado en casa de nuestro pobre Alejandro Sawa. He llorado delante del muerto, por él, por mí, y por todos los pobres poetas. Yo no puedo hacer nada; usted tampoco; pero si nos juntamos unos cuantos, algo podríamos hacer. Alejandro deja un libro inédito. Lo mejor que ha escrito. Un diario de esperanzas y tribulaciones. El fracaso de todos sus intentos para publicado y una carta donde le retiraban una colaboración de sesenta pesetas que tenía en El Liberal le volvieron loco en los últimos días. Una locura desesperada. Quería matarse. Tuvo el final de un rey de tragedia: loco, ciego y furioso.
Grabado de Ricardo Baroja
No hay comentarios:
Publicar un comentario